martes, 3 de junio de 2014

Porque tú lo vales

Cuando os hablé de enamorarse después de los 40 finalizaba diciendo “Estamos más y mejor preparados tanto para lo bueno como para lo malo”

Desde la psicología se aborda ese “estar preparado para lo malo” con el concepto «Resiliencia» que se define como la capacidad que tenemos para sobreponernos a situaciones adversas o a periodos de dolor emocional. En lenguaje más coloquial este concepto se corresponde aproximadamente con el de “entereza”. Esa capacidad es innata en el ser humano, ya que se observan altos grados de resiliencia en niños muy pequeños sometidos a situaciones adversas, pero no cabe duda que esta capacidad se va incrementando con el aprendizaje.

El dolor emocional que produce la ruptura de una relación en la que habíamos puesto todo nuestro “ser emotivo”, amando al otro, es muy intenso y llega a provocar verdaderas catástrofes en nuestro corazón y mente. Tendremos momentos de ira, de desesperación y de depresión, pasaremos fases de melancolía con grandes dosis de tristeza y enormes deseos de volver.

Todos conocemos las cinco fases en las que se divide el proceso de una ruptura: negación, ira, negociación, tristeza y aceptación.

Una persona resiliente tiene más posibilidades de resistir, adaptarse y fortalecerse ante este tipo de situaciones. Su éxito se basa en la creencia de que uno puede influir en lo que sucede a su alrededor y que se aprende de toda experiencia, teniendo clara la existencia de un propósito significativo en la vida, utilizando el apoyo social del que dispone a su alrededor comunicando sus sentimientos de manera adecuada, mostrando una mente abierta y receptiva a nuevas ideas, con independencia de pensamiento pero con una gran habilidad para dar y recibir en las relaciones con los demás y que, con su sentido de la responsabilidad, siendo disciplinados, soñadores y con alto sentido del humor pueden tolerar ese sufrimiento y así revertir lo negativo en positivo más rápidamente.

Cada uno de nosotros poseemos estas características en mayor o menor grado y no me cabe la menor duda de que si realizamos un trabajo correcto de introspección sabremos aprovechar y potenciar mejor nuestras capacidades y salir antes y más fortalecidos de un desengaño amoroso.

Como dice una sabia brujilla que conozco:

“Porque tú lo vales…”

No hay comentarios:

Publicar un comentario