La propuesta os puede parecer contradictoria
ya que, todos tenemos claro, que el romanticismo es, en sí mismo,
pasional. Quizás hubiera sido más correcto poner Pasión vs
Sentimentalismo, pero se podría ver como una trampa,
ya que el sentimentalismo, literalmente, es la apelación a los
sentimientos que es, además, característica general del romanticismo.
Siendo más concreto, la propuesta debería ser Pasión sexual vs Pasión
romántica.
La pasión es una emoción intensa que aparece cuando
se establece una fuerte afinidad. Las pasiones se encuentran en seis
ámbitos: amor, deseo, gozo, odio, aversión y tristeza. Es, sin lugar a
dudas, un estado durante el enamoramiento y la remisión de la misma
puede ser el aviso de su agotamiento, tanto si da paso al amor como si
no es así.
No cabe duda de que la pasión referida a la
sexualidad se ha convertido en nuestros días en un claro exponente del
grado de salud de una relación de pareja. No fue tan así en un pasado no
tan lejano, donde lo romántico predominaba sobre la sexualidad, siendo
en muchos casos inhibidor el primero sobre la segunda.
Por otro
lado, el romanticismo o sentimentalismo es una manera de sentir, donde
se da una subjetividad y un culto al “yo” y al “otro”, donde tienen
cabida la fantasía, la ilusión y la idealización. Aparece en las
primeras fases del enamoramiento siendo el hombre, las más de las veces,
“el emisor” y la mujer “el receptor” de aquellos mensajes o simbolismos
propios de lo romántico.
A día de hoy, puede parecer que el
romanticismo está en desuso y los cortejos tienen más componentes de
urgencia sexual y “pavonamiento” que de una búsqueda de información
sobre: actitudes, carácter, expectativas, cultura, hábitos, etc., que dé
paso al establecimiento de una relación con un comienzo romántico que,
poco a poco, llevará al conocimiento sexual.
Desde mi punto de
vista, la clave está, como en casi todos los aspectos de la vida, en el
equilibrio. Una buena dosis de pasión romántica o de atracción
sentimental combinada con otra de pasión sexual o de atracción física
debe ser la mezcla perfecta que aliente, mantenga y haga duradera una
relación de pareja. Cada cual elige las proporciones y la clave está en
buscar el equilibrio entre los propios deseos y los de nuestra pareja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario